jueves, 21 de febrero de 2008

intento de minificcion e intertextual


Alicia al enterarse de como había difamado su muerte su creador (y también su asesino) HQ, se alzó con toda la intención de encararlo. Al verla caminar por la calle, su marido se quedo atonito ante a quel extraño milagro. ¿Cómo era posible que su dulce y pasiva esposa reviviera con tanta furia, con ojos de enojo y venganza?¿A caso ya no le importaba ser comidilla?

Ella se volteó a verlo, contestando a sus impronunciadas preguntas: En la muerte uno ya no tiene que perder. Luego, empezó a correr para alcanzar al chismoso escritor.

No hay comentarios: